El fabuloso poder de incorporar el caminar como parte de la rutina diaria
Descubre cómo esta simple actividad nos favorece cuando envejecemos
La inteligencia emocional se puede mejorar cada día cuando transformamos en positivo las reacciones que tenemos frente a las emociones negativas.
En el año 1995 el profesor de la Universidad de Harvard Daniel Goleman, escribió el libro “La inteligencia emocional”, y la definió como la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de los demás, manejar adecuadamente las emociones y principalmente, la reacción que tenemos frente a ellas.
Mira el video y conoce las características de una persona emocionalmente inteligente:
- Autoconocimiento: se conoce a ella misma, sabe y entiende los estados de ánimo que tiene y a qué se deben. Comprende las consecuencias que esos estados de ánimo pueden tener en otras personas.
- Autorregulación: controla los impulsos, emociones y piensa antes de actuar. Sabe utilizar la asertividad, está abierta a nuevas ideas y es flexible ante los cambios.
- Empatía: se pone en los zapatos del otro. Sabe cómo se siente, sus emociones, y por qué las expresa de una determinada manera.
- Habilidades sociales: sabe gestionar correctamente sus habilidades sociales para tener contacto con todo tipo de personas y generar confianza.
- Automotivación: es capaz de automotivarse y de buscar en su interior las razones para cumplir objetivos. No necesita que la reconozcan ni la feliciten cuando logra algo.